CUATRO JUGADORES cubanos con el uniforme de los Senadores de Washington en la temporada de 1950: Conrado Marrero, Sandalio "Potrerillo'' Consuegra, Roberto Ortiz y Rogelio "Limonar'' Martínez.
Fue uno de los serpentineros estelares del amateurismo cubano en la década del cuarenta junto a estrellas de la talla de Conrado Marrero, Julio ‘'Jiquí'' Moreno, Pedro "Natilla'' Jiménez, Sandalio "Potrerillo'' Consuegra, Isidoro León, Angel ‘'Catayo'' González, Daniel Parra, Antonio Estrella, René "Tata'' Solís, Tomás Echevarría y Antonio "Lindo'' Suárez.
Rogelio "Limonar'' Martínez nació el 5 de noviembre de 1918, en Cidra, Matanzas. Brilló en el béisbol amateur con el Club Deportivo Matanzas e integró con este equipo el famoso trío de lanzadores que se les llamó "Los Tres Mosqueteros'.
Los brazos de "Potrerillo'' Consuegra, "Catayo'' González y "Limonar'' Martínez, siguieron en versión deportiva el ejemplo de Aramís, Athos y Porthos: "Uno por todos y todos por uno''.
Durante su carrera amateur acumuló 49 victorias y 22 derrotas con 2.62 de efectividad con la novena matancera, ayudando a este equipo a ganar el título en la temporada de 1943.
La campaña de 1943 está considerada una de las mejores de la Unión Atlética. Restando una jornada para concluir la etapa regular, aún no se conocía el equipo ganador.
Matanzas tenía récord de 22 victorias, cinco derrotas y un empate, mientras que el Círculo de Artesanos de San Antonio de los Baños sumaba 22 triunfos y seis reveses. Solo existía una diferencia de medio juego a favor de Matanzas.
Las llamadas "Cotorras'' de Ariguanabo habían derrotado 9-1 a Regla, en desafío donde el estelarísimo ‘'Jiquí'' Moreno ponchó a 14 bateadores, ocho de ellos de forma consecutiva para establecer una marca en la pelota amateur.
Con la victoria, el Círculo de Artesanos empataba en el lugar de honor y esperaba el resultado entre Matanzas y el Círculo Militar y Naval.
La novena del Deportivo Matanzas dirigida por Pipo de la Noval y guiada por los brazos de sus tres estrellas del montículo, Consuegra, Catayo y Limonar, además del bate y el guante del torpedero Angel Fleitas, del receptor Rouget Avalos y de jugadores como Marcos Monroy, Mario Díaz, Gaspar ‘'El Curro'' Pérez, Armando Gallart, Enrique Hernández, Derubín Jácome, Juan Pérez, Isidro Fernández y Juan Rodríguez, conquistó el campeonato al derrotar 3-1 en el Estadio La Tropical al potente elenco del Círculo Militar comandado por Evelio "El Capitán'' Miranda.
Martínez vistió el uniforme del equipo Cuba en las Series Mundiales de 1941, 1943 y 1945 donde acumuló cinco victorias y una derrota.
Una de las hazañas de "Limonar'' ocurrió en la Serie Mundial de 1943, celebrada en La Habana, cuando pintó de blanco a México con sólo 63 lanzamientos, logrando un promedio de siete envíos por entrada.
Después de tener una brillante hoja de servicios en el campo amateur, Martínez decidió pasar al béisbol profesional y actuó en seis temporadas en la pelota cubana con los Alacranes del Almendares, Tigres de Marianao y Leones del Habana. El derecho sumó 16 triunfos con 3.09 de efectividad.
El 6 de febrero de 1950, Martínez tiró un juego de cero hit cero carrera frente a los azules del Almendares en el Estadio del Cerro. El serpentinero participó en dos Series del Caribe (1952 y 1953), ambas con el Habana.
Rogelio lanzó con los Havana Cubans entre 1947 y 1950 y alcanzó una excelente marca de 38 victorias con 17 reveses.
Llegó a Grandes Ligas a los 32 años de edad y su actuación se limitó a sólo un juego en la temporada de 1950 con los Senadores de Washington.
Pocos aficionados y hasta expertos conocen la verdadera razón por la que Rogelio Martínez se vio limitado en las Mayores. Algunos lo atribuyen a la edad, pero ésta no fue la única causa.
Tres días antes de ser ascendido a las Mayores con los Senadores, Martínez se lastimó una rodilla en Ligas Menores y en su afán de llegar a Grandes Ligas no informó lo que le sucedía. Dicha lesión le afectó de tal manera que sólo pudo lanzar en un partido y a partir de ese momento terminó su carrera como lanzador.
El resultado de la lesión lo acompañó hasta el día final de su vida, donde meses antes por razones de esa misma rodilla tuvo una caída y le complicó la salud hasta llevarlo a la muerte.
Falleció a los 91 años de edad el pasado lunes 24 de mayo del 2009, en Connecticut.
El nombre de Rogelio "Limonar'' Martínez está escrito con letras de oro en la historia del béisbol amateur cubano.
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