PARA CUBA ES TODO O NADA DESDE AHORA

(Tomado del blog Visor Cubano)

Por Daniel Palacios

Luego de la muy necesaria victoria dominical ante Holanda 5-3, Cuba enfrentará a partir de mañana martes una instancia definitoria y sumamente complicada en la XXXVIII Copa Mundial de béisbol, si de recuperar el cetro universal se trata.

La llamada “semifinal” acogerá a ocho elencos — cuatro por grupo — y, en un sistema de clasificación lamentablemente kafkiano, solo los dos equipos más ganadores accederán a la diputa del título.

Parece normal si se mira de forma somera, pero lo inusitado es que cada conjunto arrastra a esta fase las derrotas de la ronda anterior, por lo que Cuba, Holanda y Puerto Rico están en franca igualdad de condiciones, aunque de ganar estos equipos todos los choques en la ronda italiana, los cubanos estarían en desventaja, y entonces el cetro se alejaría de nuestras ansiosas manos.

Como ve, la selección antillana está obligada a ganar en una fase que tiene como elencos clasificados a Holanda, Cuba, Puerto Rico, Venezuela, USA, Australia,China Taipei y Canadá.

Hasta el momento el rendimiento de los discípulos de Esteban Lombillo ha fluctuado entre la excelencia de Alfredo Despaigne — colíder en cuadrangulares, junto a Justin Smoack (Estados Unidos), ambos con seis vuelacercas —, el juego hábil y explosivo de Leonys Martín, la oportunidad de Michel Enríquez; y el desespero y desajuste de José Dariel Abreu, Yulieski Gourriel, Frederich Cepeda.

Los principales impulsadores de la escuadra nacional no han sido estables en su rendimiento, por lo que hemos tenido, tanto resultados holgados de 10-0 (Puerto Rico y España), como “sustos” ante los ibéricos (5-4) y derrota ante los boricuas (2-5), con una ofensiva gélida.

Al finalizar la segunda ronda de competencias, Cuba bateó colectivamente para un bajo 276 (quinto), con 10 cuadrangulares (20 en todo el torneo), mientras que desde la lomita se mantuvo como líder (demuestra una vez más que son nuestros serpentineros quienes sacan la cara a la hora de la verdad) con 1.02 PCL.

La ronda que se avecina ya no tendrá elencos “asequibles” como Gran Bretaña, España, o amainados (decidieron no darle tanta importancia al torneo y enviaron equipos universitarios, semiprofesionales o amateurs) como Corea del Sur, Nicaragua y Venezuela. Ahora los errores o slumps cuestan cada vez más caros, y si se quiere retomar la cima mundial, la excelencia debe estar repartida en todo el conjunto.

Mantenerse jugando con picardía, movimiento y rapidez, combinados con el aporte de largo metraje será la clave para lo que se avecina.

Nuestros lanzadores deberán mantenerse como hasta el momento, aunque los movimientos en los relevistas pudieran ser menos temerarios, y jugadores como Vladimir García asumir el papel para el que fueron seleccionados: cerrar. Ahora es todo o nada y cada riesgo debe pensarse bien.